Como para no tenerla en cuenta. Estricta en su trabajo como un coronel duro rodeado por un enemigo malísimo, muy segura de sí misma, casi tan alta como John Wayne y de órdenes precisas, cortas y bien analizadas. La empresaria marroquí
Nezha Laich, que además habla mejor el español que mi primo segundo de Valladolid, abrió hace ocho años el restaurante Mosaico en el centro de la capital malagueña (calle Sánchez Pastor, número 6) con las ideas más transparentes que solo claras, y poquito a poco fue situando su negocio entre los más relevantes de toda la Costa del Sol especializados en la cocina de su país.
La filosofía de Nezha es la más pragmática de todas las que puedan rebuscarse en esta industria tan puñetera: Buen producto, buen servicio, buena presentación y buenos precios. Y lo mejor es que ahora vuelve a ponerla en práctica en una estupenda terraza con barra para copeo que inauguró hace apenas tres semanas en el cogollo del Cerrado de Calderón, justo allí donde el otro día conté hasta una quincena de establecimientos hosteleros en apenas 150 metros. Así que también sería justo añadir que esta emprendedora es más valiente que Tom Hanks en Salvar al Soldado Ryan.
Cúrcuma se llama su nuevo restaurante, de estética informal pero sugerente, abierto al cielo pero debidamente sombreado con toldos y esteras, colorista pero funcional y de fogones muy bien centrados en una carta honesta y atractiva que te invita a probarlo todo por la contundencia de sus propuestas y los sabrosos acompañamientos en especias, hierbas aromáticas, frutos secos o aportes dulces.
La lista de mis platos favoritos es más larga que el túnel de El Chorro (la carta es similar a la del restaurante Mosaico), pero les voy a proponer media docena. Imprescindibles la ensalada de berenjena asada (o zaaluk, 8 euros la ración), la pita de falafel con salsa de yogur (6 euros), la pastela de pollo con almendras y canela (8,5 euros), el tabulé (o ensalada de cuscús, 4 euros la media ración), el hummus (7 euros) o un estupendo tartar de salmón con mayonesa de mango que le abre la puerta a una gastronomía más internacional y menos étnica. Y de plato principal escoja alguno de sus seis tipos de excelentes cuscús (de 11 a 15,5 euros) o el tajín de ternera con ciruelas y almendras (14 euros). Al final he pasado olímpicamente de la media docena, pero recuerde todo lo que le he contado.
Dirección. Calle Rodeo, número 1 (zona baja y comercial del Cerrado de Calderón). Teléfono: 952 274 628.
Javier Sánchez/18/junio/2021
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