Hay que ser muy tonto para que un día sufras una parada cardíaca y
dos semanas después vayas a un restaurante de infarto. El tonto soy yo,
quién va a ser, y el restaurante se llama EnBoca. Bueno, el restaurante
no, sino un gastrobar excelente que en poco menos de medio año se ha
convertido en una de las grandes referencias de Arroyo de la Miel
(Benalmádena, Málaga). Rodeado de tabernas, mesones y bares con barra de
aluminio y camareros con bolígrafo y lamparones, de esos de toda la
vida, sí puedo asegurar que este negocio ha puesto el acento donde antes
solo había un punto y final.
El joven
Pablo Merino (Málaga,
1993), un chef abierto pero educadísimo, instruido en La Fonda y
trabajador incansable en otros cuatro o cinco establecimientos de cocina
multifuncional, decidió el pasado 1 de mayo inaugurar su propio local
con la saludable intención de ofrecer algo distinto, muy bien
estructurado, singular y de características culinarias sobresalientes en
una zona que apenas goza de algún lugar notable. Y eso siempre hay que
aplaudirlo por obligación, como hacen los coreanos del norte.
Ayudado en la sala por su pareja,
Naomí Núñez,
EnBoca ofrece una fusión óptima de tres de las mejores cocinas del
mundo, japonesa, peruana y mejicana, y además lo hace desde una
perspectiva ibérica tradicional que, sencillamente, te entra por los
ojos antes de masticarlo todo con los dientes. No importa que ya te
falten la mitad de las muelas porque vas a disfrutar lo mismo que esa
señora del anuncio de Corega.
Chiquito por dentro (ocho mesas),
con terraza coquetona, de muy buenos precios, una carta enormemente
equilibrada, elaboraciones honestas y un listado corto de sugerencias
del mes, como a mí me gusta, sus propuestas se dividen en cinco
secciones atractivas (tapas, para abrir boca, principales, arroces y
postres) que incluyen una treintena de platos. Yo le voy a proponer
siete, y creo que no me voy a equivocar en la elección. Prometido.
Empiece usted con la
ensaladilla EnBoca (con toque japo y gambas al pil pil, 9,5 euros) y unas
croquetas de jamón y velo ibérico (7,5 euros), aunque los
saquitos de carrillada (10,5 euros) también están para invitarlos a la ópera. Los
nems de cerdo criollo (10 euros) o el
entrecot madurado (400 gramos, 29 euros) tiene usted que memorizarlos a la fuerza, mientras que el
arroz del sapionet (calamaritos, salmorreta y alioli, 14,5 euros) es un buen final antes de zamparse a lo bestia una
torrija de la casa (pan
brioche caramelizado con helado de leche merengada, 7 euros). Eso sí,
nunca olvide ojear la carta de sugerencias que concentra media docena de
estupendas especialidades. Echarse más tarde una siestecilla le
alegrará el día. E incluso la noche.
Dirección. Calle San Telmo, número 18. Arroyo de la Miel (Benalmádena, Málaga).
Teléfono: 951 639 075.
Horario: de una a cuatro de la tarde y de ocho a doce de la noche.
Cierra el domingo por la noche y el lunes.
Javier Sánchez/9/noviembre/2023
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